La Enseñanza para la Comprensión

En las escuelas donde se trabaja con EpC, los alumnos accionan sobre el entorno en situaciones reales.
Un alumno que comprende, hace un uso productivo de lo que aprende, es decir vuelca en su ámbito cultural producciones valoradas por esa cultura.
Por esta razón, las asignaturas académicas se enseñan con tareas que presentan desafíos a resolver en áreas presentes en la sociedad como el deporte, el comercio, el arte, los oficios, las profesiones, la política, etc…
El conocimiento se convierte, por tanto, en una herramienta reflexiva para desarrollar productos, resolver problemas, formular juicios, transformar la vida cotidiana, etc…
Cambiar el concepto acerca del conocimiento académico o escolar entendiendo el aprendizaje como una herramienta, permite a los alumnos entender los hechos del mundo como relacionados entre sí y no como hechos aislados; y comprenden que las producciones humanas, en todas las áreas, tienen un impacto sobre el mundo que también influye en sus vidas y en las diferentes culturas y sociedades.
En la EpC se trabaja con tareas prácticas, currículo interdisciplinario, con proyectos, con portfolios.
Estimular la comprensión es, o debería ser, el máximo objetivo de la escuela. Para ello hay ciertas preguntas básicas que han de hacerse los equipos docentes:
¿Qué significa comprender? De qué manera desarrollan los niños la comprensión?
¿Cómo sabemos si los alumnos han comprendido un tema?
Y, fundamentalmente, hay una pregunta que llevará a los equipos a replantearse el modo de enseñar en la escuela y en cada aula ¿Cómo apoyarán el desarrollo de la comprensión en sus alumnos?